Por: Yanio Concepción
Con el derrumbe de la antigua vivienda histórica patrimonio arquitectónico vernáculo de La Vega, de la casa donde vivió don Federico García Godoy en el centro del casco urbano, es un duro golpe a un monumento histórico de esta ciudad, realizar esto con la advertencia de la autoridad de planificación urbana del ayuntamiento de La Vega es más que un desafío publico que debe investigarse hasta las últimas consecuencia, el corresponde a las autoridades responsable de vigilar por el casco histórico patrimonio de La Vega dar una respuesta a la población.
Estos momento histórico de La Vega están amparado por resolución de la sala capitular del ayuntamiento La Vega, el hecho ocurrió el 16 de agosto a la 4 de mañana en plena transición de las autoridades municipales de La Vega, se sospecha que el dueño residente en San Francisco de Macorís derribó el hogar del intelectual por oferta de una institución financiera de esta ciudad.
En esta casa el padre de Don Juan Bosch, Don José Bosch, intelectuales realizaban tertulia, y en que ocasiones fue visitada por el Apóstol cubano José Martí amigo personal de Don Federico García Godoy prestigioso intelectual, crítico literario, periodista, político y educador Dominicano. La indolencia y la falta de una política de protección del patrimonio arquitectónico de La Vega, se están destruyendo estos patrimonios en la cara de las autoridades.
La presencia de José Martí, el apóstol de la revolución de la independencia de Cuba, cuando visito por ocasiones La Vega real, ocurrió el 15 de septiembre del 1892, y la segunda, el 18 de febrero de 1895, en compañía del general Máximo Gómez, Nicolás Ramírez, Francisco Borrero y Enrique Collazo quienes partieron desde Santiago de Santiago de los Caballeros salió a pernoctar a la casa de Federico García Godoy.
Así expreso García Godoy en su primera visita a su hogar de José Marti:” el se fue a la labor ardua y penosa de a un pueblo, a la lucha resonante, rumbo a una muerte prematura y gloriazo…”, asi narra Don Federico García Godoy su primer encuentro con el apóstol José Martí, en su hogar en la Vega. “recuerdo de nuestro primero y único contacto espiritual persiste con fuerza indeleble en mi memoria…me encontraba solo en la sal de mi hogar…en una mecedora, de espaldas a la calle. De súbito sentí un leve ruido, como si alguien se aproximaba…volvi rápidamente la cabeza. En el umbral, un hombre blanco, de mediana estatura, de cara expresiva, en que lucia un espeso mostacho y en que la mirada fulguraba, delatando una inmensa vida interior, se ergia sonriente ante mis ojos. En mi mirada se formulaba como una interrogación persistente…!Jose Marti! Un abrazo muy estrecho nos unió seguida y prolongadamente”.
Don Juan Bosch en sus años mozo decía de Don Federico García Godoy, “me peinaba con las largas manos y aseguraba que yo heredaría su pluma. “Te la voy a entregar antes de morir para que la rejuvenezcas y conserves” me decía. Padre le leía con justificado orgullo las tonterías que yo escribía niño aún.”
“Él escuchaba con discreta actitud. Yo admiraba su frente alta, tan blanca, tan pulida, tan llena de luz. Me sugestionaba oírle discutir con papá. Generalmente vestía con extremada sencillez, a veces sin corbata, siempre tocado con gorra. Así iba al parque, de americana blanca y pantalón gris, admirado y respetado y querido.”
El valor histórico de los pueblos lo dejan los hombres con su hombre con su entrega dedicación a casa justa, esta destrucción de la casa de Don Federico García Godoy, refleja el deterioro de una sociedad indolente a los legados de hombre y mujeres que dieron su vida por esta patria sin doliente a los monumentos y obra diga de seguir para futura generación.
Narra el profesor Juan de la sapiencia del Don Federico, “corrían los tiempos locos de la guerra. Padre sentía en la carne la tragedia rusa y la gritaba como si fuera suya; don Fico detestaba de aquel sentimiento y acusaba a mi padre de anarquista. Se enredaban en largas discusiones y a veces les sorprendía la soledad de la plaza, tarde ya. Yo cabeceaba sueños en la esquina de un banco.”.
Si las autoridades no se ocupan de preservar la historia de su pueblo, estaremos rumbo la inconsciencia social, destruir el patrimonio arquitectónico vernáculo que el hogar del Don Federico Garcia Godoy es una afrenta del país, así mueren los grandes hombre que dejan sus huellas sin rescatada por las autoridades, porque no se respeta nada.