Por: Yanio Concepción
La respuesta social ambiental del pueblo va en aumento. La conciencia colectiva toma cuerpo con la exigencia de su derecho por la defensa de los recursos naturales y sus riquezas. Es buen ejemplo nacional lo que se materializó el sábado 14 de septiembre en La Vega en defensa de Loma Miranda. Las concesiones mineras otorgadas por el Estado, sin tomar en cuenta a los moradores ni el país, están dejando atrás un fardo de negocios, triquiñuelas y contratos amparados por el Congreso y el Poder Ejecutivo que lesionan el interés nacional.
El sábado 14 de septiembre, la Iglesia Diocesana en La Vega demostró la disciplina ambiental que han asumido los dominicanos con “Loma Miranda, Parque Nacional: no se toca ni se negocia”. El obispo Antonio Camilo, quien encabezó esta jornada, recorrió el camino desde la Catedral la Inmaculada Concepción y expresó: “Con Loma Miranda el Estado debe buscar un modelo de desarrollo que no solo se base en el provecho, en la utilidad y en lo material”. Es responsabilidad del Estado prevenir, reparar el daño a la biodiversidad nacional y garantizar el agua de la futura generación.
La Vega ha iniciado una nueva visión de conciencia ciudadana con la defensa de Loma Miranda como pulmón de media isla. La Iglesia Diocesana, junto a otras instituciones, ha dado una muestra de la licencia social y la soberanía del país y sus ciudadanos. Ahora les corresponde a las autoridades nacionales determinar el rumbo del proyecto de ley Loma Miranda, Parque Nacional.
Hay que reflexionar qué camino está marcando la sociedad y qué rumbo quieren los actores políticos, empresariales y sociales. Lo ocurrido en La Vega representa la fuerza moral y ética de la Iglesia Diocesana dirigida por el obispo Antonio Camilo a favor de la defensa de Loma Miranda. Preservar esta Loma es proteger la producción de alimentos, el agua, la captura de dióxido de carbono y la biodiversidad de la isla.
¡Defender Loma Miranda es amar la vida! Loma Miranda nos mira con su majestuosa belleza, nos mira desde lo alto clamando su defensa.
El novenario de la celebración de la Virgen de las Mercedes empezó con el recorrido hacia Loma Miranda para elevar a Dios una plegaria por la protección de Loma Miranda, Parque Nacional y por el pueblo que lucha por proteger su patrimonio natural. ¡Defender Loma Miranda es defender la vida!