¿Qué predecir, a qué apostar en el 2013?

¿Qué predecir, a qué apostar en el 2013?

Por: Yanio Concepción
Editorial Radio Santa María
3 de enero, 2013

República Dominicana es especial. No es la octava maravilla del mundo pero tiene más de ocho maravillas. Posee enormes riquezas y hombres y mujeres que aman su patria y que están dispuestos a trabajar y a luchar por ella. Desafortunadamente solo algunos de ellos han escalado al liderato estatal.

La administración pública de nuestro país, en este momento, no necesita planificación estratégica ni predicciones agoreras. Cientos de estudios han determinado lo que se debió, se debe y se debería hacer en los próximos cincuenta años. Mentes prodigiosas, con doctorados internacionales, han dirigido el país en los últimos cuarenta años de vida democrática, pero, paradójicamente, no han propiciado ni auspiciado el cambio radical que el sistema educativo nacional amerita como lo soñó el patricio Juan Pablo Duarte, maestro ejemplar para todos los dominicanos.

Apostemos a la calidad de la educación a través de la construcción de aulas, la capacitación de una nueva generación de maestros con vocación de servicio y una sólida formación  personal y académica. Este es un desafío que los gobiernos dominicanos se han traspasado como tarea pendiente. Una patria más justa, habitada por hombres y mujeres de paz, una ciudadanía capaz de erradicar la violencia social, la corrupción y la pobreza es el resultado deseado de una inversión seria y sabia en educación.

Apostemos a que la delincuencia se combata con educación, trabajo y respeto a las leyes, con salarios justos para los servidores públicos. Apostemos al control del narcotráfico con una política interna y externa consagrada a impartir justicia, sin distinción ni excepción, a cualquiera que la viole.

Apostemos a los hombres de fe, pacificadores  y creíbles que encaminen esta sociedad a una verdadera comunión con Dios. Este es un sueño por cumplir de muchos dominicanos. Apostemos a la reducción de la deuda nacional, aunque tengamos la capacidad de endeudarnos. Esta es una decisión sabia e inteligente de líderes comprometidos con el bien común.

Apostemos a que en el 2013, el Presidente de la República gobierne para todos los dominicanos, castigando a los simuladores, usurpadores y desfalcadores de las arcas nacionales así sean de su misma familia o de su mismo partido. Apostemos a un cambio en el sistema político dominicano que deje atrás los vicios caudillistas a fin de que los poderes del Estado puedan actuar de forma libre e independiente de intereses particulares.

Apostemos a que los niños puedan disfrutar  cada año el espíritu de la Navidad y esperar, con ilusión, los regalos de los Santos Reyes, con motivo del nacimiento del niño Jesús. Apostemos a la educación, a la cultura para construir una democracia real donde prevalezca Dios, la Patria y la Libertad en honor a la declaratoria del 2013 “Año del bisnatalicio del Padre de la Patria Juan Pablo Duarte”.

Apostemos para ganar. ¡Que el 2013 colme los titulares de prensa de buenas noticias que hagan más ruido que las malas! ¡Hombres y mujeres valientes, dominicanos de fe, ciudadanos de valor, hagamos nuestro mayor y mejor esfuerzo para cambiarle el rumbo a nuestra Patria querida! ¡Apostemos valentía, entrega, dedicación, honor, sueños, esperanza y trabajo para que ganemos todos una Dominicana digna!